La figura del único presidente de un Gobierno regional europeo fusilado durante los años de la Guerra civil y de la Segunda Guerra Mundial obtendrá reparación en breve. El Gobierno central emitirá antes de tres meses una declaración de reconocimiento a la figura de Lluís Companys, el ex presidente de la Generalitat de Cataluña ejecutado en 1940 tras un consejo de guerra celebrado sin ningún tipo de garantías legales.
Una de las nietas de Companys, Maria Lluïsa Gally, es la impulsora de la reparación, junto al Gobierno de la Generalitat. Gally y el consejero de Relaciones Institucionales catalán, Joan Saura, entregaron ayer al ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, la documentación para comenzar el proceso. Tras la reunión, el secretario de Estado de Justicia, Julio Pérez, se comprometió a tener lista la declaración de reparación en tres meses. "Es un trámite muy sencillo", dijo. La de Companys se suma a las 138 peticiones de reparación que ya se han cursado al amparo de la Ley de Memoria Histórica.
La voluntad de la familia del ex presidente de la Generalitat, capturado en Francia por la Gestapo con la mediación del embajador español José Félix de Lequerica, es que la reparación culmine con la anulación del consejo de guerra. Esto último no está amparado en la ley de Memoria Histórica.
Con todo, la parte demandante considera que la reparación abre la puerta a que se pueda reabrir la causa contra Companys para pedir la anulación.
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