Juan Carlos Gentile (vestido de azul), secretario de l'ANCIS, y Francisco José Rodríguez Velasco (con medalla en el cuello) |
El evento se celebrará este 4 de noviembre dentro del edificio consolar con la presencia de representantes de la Falange. Asociaciones de italianos residentes en el estado exigen que no se autorice el acto.
Por laRepublica.es -
Este miércoles 4 de noviembre, miembros de la Falange y de la
Associazione Nazionale Combattenti in Spagna (l’ANCIS), se reencontrarán
en la embajada italiana en Madrid para celebrar un acto de apología del
fascismo. La sede diplomática de Roma en España esponsoriza este acto
de una gira que l’ANCIS, la asociación nacional de los caídos, está
haciendo estos días por la península coincidiendo con el 4 de noviembre,
día de las fuerzas armadas italianas.
l’ANCIS es una asociación compuesta por nostálgicos mussolinianos, el secretario nacional de la que es Juan Carlos Gentile. La asociación también pertenece a la Unión Nacional de los Cuerpos de la República Social Italiana (UNCRSI). Hablamos de un momento muy oscuro de la historia de Italia, cuando después del armisticio del 8 de septiembre, los fascistas más duros, fundaron una república para seguir la guerra al lado de Hitler. En un comunicado fechado en 2012, l’ANCIS recordaba que “el fascismo realizaba junto a los deseos sociales y patrióticos de Italia, a pesar de no ser colocado en la parcialidad de la derecha o de la izquierda con las que ahora se separan los postizos parlamentos plutocráticos”.
Según fuentes de los coorganizadores del acto, la Falange con la
Fundación Hispano Latina tomarán parte del mismo con la intención de
homenajear a los militares italianos que Mussolini envió para ayudar
Franco y combatir la República en 1937. Según los datos que ha podido
recopilar la Directa provenientes de las mismas asociaciones fascistas,
el viaje ha consistido en acompañar el Cuerpo de Tropas Voluntarias
(CTV) en los lugares más representativos del Franquismo por toda la
geografía española: el Valle de los Caídos, la Cripta de San Antonio en
Zaragoza y el Alcazar de Toledo, para homenajear el “heroico defensor
General Moscardó”. Sin embargo, es probable que no sean sólo ellos
quienes participan de estos actos. El año pasado también hubo una
representación del Movimiento Católico Español (MCE) y de Acción Juvenil
Española (AJE), con su jefe nacional, José Luis Corral, a la cabeza.
Será este miércoles cuando se vivirá el momento más controvertido. El
acto final de esta ruta se celebrará en la embajada de Italia en
Madrid, situada en la calle Agustín de Betancourt número 3, para
escenificar “la celebración de las fuerzas armadas italianas y el 97º
aniversario de la victoria de la Primera Guerra mundial “. Desde hace
años que los dos grupos se reencuentran en estos días, para reforzar
“lazos de hermandad”. Ya se hizo la misma ruta en 2013, año en que se
nombró Pietro Sebastiani como embajador del país transalpino. Sebastiani
dejó claro sus posicionamientos sobre temáticas relacionadas con la
memoria histórica. El mismo año de su nombramiento como máximo
representante diplomático, diferentes asociaciones quisieron conmemorar
los voluntarios italianos, antifascistas, con un acto en Madrid. Aunque
invitar al cuerpo diplomático italiano en el estado, estos declinaron la
invitación para que, tal como comunicó la secretaría del embajador, la
celebración era “excesivamente política”.
Actualmente, asociaciones de italianos residentes en España han comenzado una campaña en la plataforma Change.org, pidiendo al embajador italiano que respete la legislación italiana, que prohíbe organizar manifestaciones fascistas en todo el territorio italiano, incluidas sus sedes diplomáticas.
La aviación italiana en Cataluña
La Guerra Civil española fue el primer conflicto armado que incorporó la aviación en las tácticas militares napoleónicas y donde se llevaron a cabo bombardeos sistemáticos contra población civil. La Legión Cóndor hitleriana y la Regia Aeronautica mussoliana fueron las encargadas de ejecutar las misiones aéreas y los bombardeos por toda España con el objetivo de aterrorizar y atemorizar a la población civil, causar el mayor número de bajas y desmoralizar el bando republicano. En 1938, la situación en el bando republicano era dramática debido a los desastres militares, los problemas de subsistencia y para la reproducción de los conflictos políticos internos. Tras la Batalla de Teruel las líneas del frente se acercaron hasta llegar al Principado. La actividad de la fuerza aérea nacionalcatólica se intensificó y la aviación italiana, con sede en Mallorca, aumentó el número de aviones Savoia-Marchetti 79 -conocidos como Esparvers- destinados a atacar la retaguardia catalana. A partir de este momento se sucedió un incremento progresivo de los bombardeos -en particular sobre Barcelona y Granollers a partir de marzo de 1938- con los precedentes de Durango, Guernica, Jaén y Figueras.
Fuente: La Directa
l’ANCIS es una asociación compuesta por nostálgicos mussolinianos, el secretario nacional de la que es Juan Carlos Gentile. La asociación también pertenece a la Unión Nacional de los Cuerpos de la República Social Italiana (UNCRSI). Hablamos de un momento muy oscuro de la historia de Italia, cuando después del armisticio del 8 de septiembre, los fascistas más duros, fundaron una república para seguir la guerra al lado de Hitler. En un comunicado fechado en 2012, l’ANCIS recordaba que “el fascismo realizaba junto a los deseos sociales y patrióticos de Italia, a pesar de no ser colocado en la parcialidad de la derecha o de la izquierda con las que ahora se separan los postizos parlamentos plutocráticos”.
Actualmente, asociaciones de italianos residentes en España han comenzado una campaña en la plataforma Change.org, pidiendo al embajador italiano que respete la legislación italiana, que prohíbe organizar manifestaciones fascistas en todo el territorio italiano, incluidas sus sedes diplomáticas.
La aviación italiana en Cataluña
La Guerra Civil española fue el primer conflicto armado que incorporó la aviación en las tácticas militares napoleónicas y donde se llevaron a cabo bombardeos sistemáticos contra población civil. La Legión Cóndor hitleriana y la Regia Aeronautica mussoliana fueron las encargadas de ejecutar las misiones aéreas y los bombardeos por toda España con el objetivo de aterrorizar y atemorizar a la población civil, causar el mayor número de bajas y desmoralizar el bando republicano. En 1938, la situación en el bando republicano era dramática debido a los desastres militares, los problemas de subsistencia y para la reproducción de los conflictos políticos internos. Tras la Batalla de Teruel las líneas del frente se acercaron hasta llegar al Principado. La actividad de la fuerza aérea nacionalcatólica se intensificó y la aviación italiana, con sede en Mallorca, aumentó el número de aviones Savoia-Marchetti 79 -conocidos como Esparvers- destinados a atacar la retaguardia catalana. A partir de este momento se sucedió un incremento progresivo de los bombardeos -en particular sobre Barcelona y Granollers a partir de marzo de 1938- con los precedentes de Durango, Guernica, Jaén y Figueras.
Fuente: La Directa
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